Juan José TAMAYO-ACOSTA, Teologías del Sur. El giro descolonizador

Amelia Sanchís Vidal

Para mostrar estas inquietudes de María Zambrano el libro, tras una Introducción (pp. 11-13) y unos Preliminares metodológicos (pp. 15-18), expone dos partes desarrolladas en tres capítulos. La primera parte Contexto biográfico e intelectual de María Zambrano (pp. 19-72) trata sobre I. El pensamiento de María Zambrano (pp. 21-32) y II. El pensamiento religioso de María Zambrano (pp. 33-72). El tercer capítulo (El pensamiento teológico) coincidente con la Segunda parte El pensamiento teológico de María Zambrano (73-104) analiza el mencionado epistolario y revisa desde él algunos tópicos (la mística, el Espíritu Santo, la Virgen y la oración), desarrollando algunos artículos anteriores de la autora como los recientes “El pensamiento teológico de María Zambrano: Cartas de La Pièce. Correspondencia con Agustín Andreu”, Aurora 16 (2015) 104-113 y “Algunas anotaciones al pensamiento teológico de María Zambrano, Pensamiento 73 (2017) 1033-1048. Este recorrido concluye (Conclusiones, pp. 105-108) con 10 notas expuestas por la autora en las que sintetiza la atención de María Zambrano a algunos de los grandes lugares teológicos que han ocupado un lugar importante en su vida y en su obra (p. 105).

Culmina esta breve e intensa obra con la Bibliografía (pp. 109-112) y dos Anexos (113-125) sobre sendos manuscritos: Del perdón, M-97 y El lugar del perdón, M-103, que muestran la valentía existencial humana y la vocación humanista desde el constitutivo último y pleno de la persona humana de la pensadora malagueña que damos fe la profesora Juana Sánchez-Gey ha sabido subrayar y transmitir en esta obra de la Editorial Sindéresis que está proporcionando, y esta es una obra más, una oportunidad a los lectores de conocer y gustar la rica tradición filosófica desarrollada en España e Iberoamérica.

Manuel Lázaro Pulido UNED

Juan José TAMAYO-ACOSTA, Teologías del Sur. El giro descolonizador, Madrid, Ed. Trotta (Estructuras y procesos), 2017, 23 x 15 cm, 252 pp. ISBN: 978-84-9879-707-7.

Teologías disidentes del Sur Global

En 1989 Tamayo escribió Para comprender la Teología de la Liberación y a pesar del profundo trabajo que realizó en el citado estudio, con su exigencia habitual, en el prólogo se lamentó de no prestar la debida atención a la teología feminista o a la negra. No sería de extrañar, conociendo al profesor, que, desde entonces, comenzara a trabajar recabando información para ampliar su ya vastísima cultura. Ahora, tenemos un volumen donde se ha ocupado de las personas que han sufrido múltiples discriminaciones incluyendo a las personas “olvidadas”, y lo ha hecho declarando su intención desde el título: Teologías del Sur. El giro descolonizador que evoca, en dos tiempos, la situación actual de la Teología de la Liberación. Un primer momento situacional de las teologías “marginales”, al Sur, no solo el Sur geográfico, sino también el sur metafórico el de la exclusión de las personas empobrecidas y excluidas por ser mujer, negra, indígena, o lesbiana; y un segundo momento, de cambio de paradigma, que tras abandonar el eurocentrismo, nos anuncia la existencia de otras formas de construcción del conocimiento alejado de la heteronomía colonial.

El título del libro es, pues, descriptivo de una obra compuesta por un Índice (contenido), con una Introducción (cambio de paradigma en el relato teológico) aclaratoria del compendio del libro, la estructura y la metodología que ha empleado y siete capítulos. Esta Introducción más los dos primeros capítulos (1. Crítica De Las Religiones Hegemónicas y 2. Teologías Emergentes, Teologías Poscoloniales), podríamos afirmar que forman un cuerpo teórico contextual que explica la evolución de la Teología de la Liberación a la vez que se van incluyendo cuáles son las teologías emergentes. De otro lado, los cinco siguientes capítulos (3. Teologías Africanas; 4. Teología Negra Estadounidense; 5. Teologías Asiáticas; 6. Teologías Latinoamericanas; y 7. Sumak Kawsay y Teología Indígena) forman el bloque práctico de dichas teologías emergentes, agrupado desde una clasificación geográfica y otra de pertenencia grupal. Su contenido es relevante para situar a las nuevas teologías en los contextos correspondientes. Podríamos afirmar que la obra funciona como un mapa y como una enciclopedia teológica, histórica y afectiva. También podríamos decir que es un “tratado” sobre las teologías disidentes, porque la obra retrata extensa y ordenadamente la materia objeto de investigación.

El libro analiza, desde las teologías disidentes, las teologías de la búsqueda perpetua, cómo realizar un buen diagnóstico de la actualidad, jerarquizando los problemas, analizando los datos, y buscando colectivamente las soluciones más incluyentes. El principal objetivo de este proyecto es conocer las diversas teologías, es decir, las diversas soluciones, para llegar como dice Tamayo, a un “diálogo intercultural, interreligioso, interétnico e interdisciplinar” sabiendo que es una llegada provisional porque es un proceso dialéctico de “desaprender-reaprender”, siempre en construcción. Es un “relato alternativo al de la teología eurocéntrica” (p. 16-17).

También es un viaje personal el que emprende el profesor con valentía para cuestionarse, parafraseando a Arquímedes, su “punto de apoyo teológico”. La base dogmática de su formación teológica la somete a examen riguroso a través de una metodología que, aun sin nombrarla, queda clara a lo largo del texto, que se encuadra en los conocimientos situados feministas, a la que después volveremos.

También se cuestiona su formación eurocéntrica para desmontar esa “Europa-fortaleza”, como ya hiciera también Saskia Sassen, apostando por el mestizaje, las migraciones y los conocimientos que se generan. Valora la necesidad de visibilizar a quienes más aportan y, a la vez, más invisibiliza el sistema: las mujeres migrantes, las diversas etnias minoritarias, los afrodescendientes, las teologías alternativas, los feminismos poscoloniales y, de fondo, los derechos humanos (pp. 20-31).

Desde los conocimientos situados y la interseccionalidad

El currículo y la vida del autor es relevante en este libro porque, sin nombrarlo, esta investigación está realizada, al decir de Sandra Harding, “desde los conocimientos situados”, en sentido amplio. Doctor en Teología y en Filosofía. Dirige la Cátedra de Teología y Ciencias de las Religiones «Ignacio Ellacuría» en la Universidad Carlos III de Madrid e imparte clases, cursos y seminarios especializados sobre teología y ciencias de las religiones en numerosas universidades nacionales e internacionales. Destacan sus aportaciones en el ámbito de la teología de las religiones y teología de la liberación a través de numerosos libros y artículos; sus aportaciones en este campo son, en la actúalidad, un referente internacional. Asimismo, a su faceta de investigador, se suma su labor como activista a través del trabajo que desarrolla en varias asociaciones; secretario general de la Asociación de Teólogos y Teólogas Juan XXIII, o su pertenencia al Comité Internacional del Foro Mundial de Teología y Liberación. Su labor investigadora es ingente, casi sesenta libros traducidos a varios idiomas, que junto a sus viajes son determinantes para entender este libro y cómo se ha recabado y estructurado la información.

Cambio de paradigma en el relato teológico

En la INTRODUCCIÓN: CAMBIO DE PARADIGMA EN EL RELATO TEOLÓGICO, el autor se revela (para acabar rebelándose) desde su postura de investigador comprometido, “consciente de que no es una mera actividad académica” (p. 11), desgrana cómo “comenzó mi apertura al feminismo y a sus principales categorías” (p. 12), construyendo una cultura de la transversalidad, sumando las alteridades negadas y distintas experiencias teológicas… (p. 14), tomando conciencia del Norte y Sur global, participando en los diálogos interreligiosos, profundizando en las riquezas de los migrantes, los afrodescendientes, los indígenas… (pp. 15-17). Su metodología la realiza, también, desde las epistemologías del Sur (p. 27) y la palabra, acuñada por Kimberlé Crenshaw, interseccionalidad (p.30).

Estas aportaciones a la investigación, que Tamayo narra al hilo cronológico de sus múltiples viajes, como un explorador-investigador que se sitúa reflexivamente ante el objeto de su investigación, consiguen que la transformación no solo opere en el investigador, sino que, así logra que la persona que se adentre en la lectura disfrute de una profundidad y de una conciencia mayor. En realidad, como diría Gérard Bessière, nos presta sus ojos y además con una humildad impropia del investigador nos muestra conocimientos, sesgos y puntos ciegos. Es de agradecer esta honradez intelectual y personal.

En la INTRODUCCIÓN, también se ofrece un “itinerario a seguir” (31-34) para la lectura del volumen, donde se resume magistralmente cada uno de los siete capítulos que componen la obra.

En el capítulo 1. CRÍTICA DE LAS RELIGIONES HEGEMÓNICAS cabe resaltar el giro monoteísta (pp. 35-38), el paradigma católico-romano (p. 38-41), el cristianismo colonial en América latina y África (pp. 41-53), cristianización y occidentalización del concepto de religión y la tipología hegemónica de las religiones (pp.53-56). En el capítulo 2. TEOLOGÍAS EMERGENTES, TEOLOGÍAS POSCOLONIALES incluye la teología en la modernidad europea (pp. 57-59) “formalmente impecable, donde todo casaba conceptualmente, pero vitalmente lánguida […] Era una teología androcéntrica, de estructura mental patriarcal, de rasgos masculinos que aplicaba a Dios, a quien representaba como varón, hasta el punto de considerar el carácter patriarcal, androcéntrico y sexista consustancial a la teología” (p. 59). También creatividad y pluralismo en la teología del s. XX, que incluye los conceptos intercultural, interreligioso y feminista (pp. 5963). Las teologías emergentes “rompen con el estereotipo”, “ha creado conflictos en las propias instituciones religiosas hasta desembocar en condenas, sanciones, persecuciones”. Entre las condenas más significativas en la Iglesia católica cabe citar las producidas contra la teología latinoamericana de la liberación y la teología feminista. Tamayo pretende “liberar a Dios del Dios del fundamentalismo, del patriarcado, del mercado, del imperialismo, antropocentrismo y de la violencia religiosa, que mata en nombre de Dios y lo convierte en asesino” (pp. 63-66). También incluye las Teologías poscoloniales (pp. 66-68) y los Diálogos teológicos poscoloniales (pp. 68-79). Ahonda en los diálogos propiciados por la Asociación de Teólogos del Tercer Mundo (ASETT) y el Foro Mundial de Teología y Liberación (FMTL) “que promueven desde hace cuatro décadas el diálogo teológico interreligioso, intercultural e interétnico Sur-sur y Sur-Norte” (pp. 68-69).

Teologías africanas, asiáticas y latinoamericanas

Entrando en la segunda parte del libro, nos encontramos con los capítulos que conforman la parte más práctica del mismo. El cap. 3. TEOLOGÍAS AFRICANAS, incluye seis epígrafes que van desde África, continente olvidado y despojado a Teología contextual sudafricana y filosofía Ubuntu (pp.81-106). “Las mujeres dejan se ser voz de los hombres, hablan con voz propia y se convierten en productoras del discurso teológico” (pp. 97-98), critica el sistema de apartheid sustentado sobre tres ejes “la identidad blanca, la civilización occidental, y la fe cristiana” (p. 100). Respecto a la filosofía Ubuntu, concluye que “la interdependencia es primordial entre los seres humanos, que se convierten en personas cuando viven en un ambiente de interacción entre diversas culturas. Fuera de ese ambiente, el ser humano no puede sobrevivir” (p. 106). El cap. 4. TEOLOGÍA NEGRA ESTADOUNIDENSE, lo componen cinco ítems (pp. 107-119) donde destaca la contradicción que surge entre ser persona negra y cristiana, las ausencias de la teología feminista, indígena e hispana. Un aporte significativo es el contenido del cap. 5. TEOLOGÍAS ASIÁTICAS por lo poco conocida que es su temática y la cantidad de población potencial que puede verse involucrada. Se estructura en nueve epígrafes que comienza atendiendo a la Diversidad, identidades plurales y reconocimiento en Asia y acaba con el epígrafe dedicado a los Aprendizajes liberadores de Asia (pp. 121-164). “El ethos asiático rechaza las rígidas murallas de la separación estable-cidas en Occidente, permite fronteras fluidas y permeables, y define la interdependencia de toda realidad en cuyo seno se encuentra la persona, que no pierde su libertad, sino que la potencia dentro de la comunidad” (p. 122). Analiza lo expuesto por Gayatri Spivak, que resalta que la mujer, como sujeto subalterno, “se encuentra aún más profundamente en la sombra” (p. 125). También resalta los textos sagrados desde el propio idioma racial-lingüístico semítico, indio y chino (p. 126). Coincide en las apreciaciones de Masiá en cuanto a la liberación de las teologías asiáticas y plantea cómo es su desarrollo teologal desde el pluriverso y el diálogo intercultural, interreligioso e intercosmovisional

(p. 127). Resaltamos la teología dalit “que pertenecen al sector más bajo de la sociedad india y viven en las afueras de las ciudades y de las aldeas en una situación de extrema pobreza […] Sus deidades están sometidas a los dioses de mayor jerarquía en la mitología popular” (p. 133). Dedica varios epígrafes a las teologías de la liberación musulmana, hindú, budista, confuciana, judía y palestina, (pp. 138-151). El cap. 6. TEOLOGÍAS LATINOAMERICANAS está compuesto por ocho puntos comenzando por ¿Ha muerto la teología de la liberación? a Teologías de la liberación y pensamiento decolonial. Destacable son las aportaciones a través de personajes notorios que van desde el nunca olvidado Heldel Cámara hasta la teóloga eco-feminista Ivone Gebara, pasando por las interesantes aportaciones de la teología feminista negra, la latinoamericana y caribeña o el fértil e incansable Pedro Casaldáliga. Tampoco se olvida el autor de las censuras vaticanas ejemplarizantes como la de Jon Sobrino. Mención expresa merece la teología Queer que pretende “recuperar el sujeto sexual plural” (p. 193) aunque haya teólogas que cuestionen que la teología de la liberación tenga ese carácter inclusivo (pp. 165-212).

La inter-identidad, verdadera identidad de los pueblos

Por último, queda referirnos al cap. 7. SUMAK KAWSAY Y TEOLOGÍA INDÍGENA, compuesto también de ocho epígrafes comienza con el Análisis histórico-crítico de la conquista y del actual modelo capitalista hasta llegar a Leónidas Proaño, paradigma de teología indígena. Destacamos el concepto Sumak Kawsay que es la filosofía, el buen vivir, o la cosmovisión de las comunidades indígenas, extrapolable a toda comunidad humana. Se establece un plan de vida entre los seres humanos y la Madre Tierra para el Buen Vivir, la comunidad, en armonía con la Pacha Mama. Su aplicación práctica se está convirtiendo en unos decálogos de reivindicaciones para las comunidades indígenas ante el Estado, este sería el caso de Bolivia o de Ecuador descritos por el autor (pp. 213-233). Finaliza el libro con unas palabras que alientan: “la inter-identidad es la verdadera identidad de los pueblos” (p. 233).

Teologías alternativas desde la complejidad poliédrica

Profundizar en el conocimiento de las teologías del Sur Global (concepto geográfico y cultural: africanas, asiáticas, latinoamericanas, indígenas y negritudes) es una empresa que requiere de conocimientos sustantivos y metodológicos que Tamayo tiene, como hemos visto, sobradamente en la teórica y en la práctica. Por esa razón, ha conseguido hacer sencillo, que no simple al decir de Popper, el contenido de este libro. Dicho contenido, está pues, orientado a la comunidad universitaria y al público interesado en materias de religiones, Derecho, Política, Sociología y cultura en general. Es, también, una forma de promover la libertad religiosa desde la raíz, ofreciendo una valiosa bibliografía que resalta la importancia de la individualidad sin restar importancia a la fuerza de la colectividad. En el volumen se incluyen a los “otros movimientos religiosos” que, en la actualidad, están promoviendo con más denuedo el diálogo interreligioso, interétnico y feminista. Nos referimos a las teologías: de la Liberación, Ecologistas, Feministas, y Poscoloniales. La mayoría de los países del mundo están inmersos en una búsqueda que dé respuesta a la crisis sistémica mundial que se rebela ante las discriminaciones que perpetúan el patriarcado, el neocapitalismo y el neocolonialismo. De otro lado, se están ofreciendo nuevas fórmulas contrahegemónicas más incluyentes que van desde las epistemologías feministas y del Sur a la democracia participativa, los feminismos poscoloniales, pasando por las Teologías del Sur.

Esta investigación ofrece la posibilidad de acudir a un texto claro que desbroce, de forma amena y rigurosa, el lado oculto del iceberg que significa el entramado de la “geopolítica de lo sagrado”, ayuda a entender algo tan cotidiano como son las noticias diarias. El libro del profesor Tamayo es una joya para quienes nos interesan las cosmovisiones sagradas y profanas porque nos ofrece una doble lectura, la confesional, desde cosmovisiones sagradas incluyendo lecturas y visiones con dimensiones sagradas disidentes a las posiciones jerárquicas, y la laica, desde cosmovisiones profanas más cercanas a la sociología de la religión.

El volumen acaba con una vasta bibliografía que cuenta con 247 referencias y un índice general. No hay conclusiones, y es razonable que sea así. La obra transmite la necesidad de estar en perpetua construcción, como la vida misma. Por otro lado, también es un documento para la consulta, por la ingente cantidad de datos y fuentes solventes que aporta, dejando un espacio impagable para que cada cual extraiga sus propias conclusiones. Es una velada invitación a la participación a través de las reflexiones propias, tras habernos nutrido de la información magistralmente proporcionada por Tamayo el teólogo, el viajero, el investigador y, en definitiva, el Maestro que nos muestra sus vastos conocimientos con sencillez. Sus contribuciones interdisciplinares son sumamente enriquecedoras y el enfoque original. Es una lectura a la que habrá que volver, con total seguridad.

Al libro de Tamayo, le deseamos una larga vida en conversatorios intergeneracionales. Esta es una investigación para leer en privado o en público, pero siempre suscita ser comentada en grupo. Especialmente en grupos compuestos de personas de distintas edades, etnias, ideologías y diversidad afectivo-sexual para que, desde el feminismo, se trabaje la enriquecedora diversidad. En tiempos de crisis necesitamos de estudios que analicen las confrontaciones y nos brinden un camino hacia la interculturalidad y la convivencia pacífica. Por la extensión y variedad de su contenido, podrán disfrutar de una completa panorámica sobre las diversas teologías alternativas, una realidad de complejidad poliédrica poco conocida pero que forma parte del panorama cultural actual.

Amelia Sanchís Vidal

Universidad de Córdoba