universo en la que “la pluralidad de los seres particulares, de los géneros y de las especies está dominado por (o enraizado en) un proceso constante de unificación” (p. 355). Una búsqueda de la unidad que Raimundo propone para comprender mejor el mundo, de ahí que “la dinámica de su pensamiento tiende claramente a unir, a limar todas las diferencias que separaban a los hombres de su época” (p. 357). Como concluye el autor, y perdónenme el spoiler, en su precioso y preciso Epílogo: “no sabemos si Raimundo Lulio ha inventado un nuevo modo de discurrir, un nuevo modo de plantearse la creencia en Dios, pero lo ha intentado. Una tentativa audaz que cada uno ha de juzgar, como quiera y le convenga, pero no sin antes estudiarla” (p. 361).
He intentado resumir el contenido para poder mostrar la riqueza de un libro que no es solo un catálogo de la obra de Raimundo Lulio (lo que no es poco), sino en realidad constituye un tratado sobre su pensamiento, toda vez que como señala el título, el pensador mallorquín siente que su obra escrita es su modo de trovar. Felicidades al autor, a la Editorial sindéresis y a la institución que promueve la colección en la que está inserta la obra: el Instituto de Estudios Hispánicos en la Modernidad (IEHM), de la Universitat de les Illes Balears que trabaja y publica denodadamente a favor de un conocimiento sin complejos ideológicos, filosóficos, culturales o historiográficos en búsqueda de la excelencia académica y que muestra el enorme trabajo y la transferencia de conocimientos del instituto de investigación.
Manuel Lázaro Pulido UNED
Manuel LÁZARO PULIDO (Coord.), Historia de la Filosofía Medieval y Renacentista I, Madrid, Editorial Sindéresis – UNED (Grado), 2018, 24 x 17 cm, 700 pp., ISBN: 97884-162-6260-1 (Ed. Sindéresis); 978-84-362-7389-2 (UNED).
La labor docente universitaria constituye un acervo de conocimientos en el docente que desea compartir su tarea académica y de investigación con la comunidad universitaria a la que sirve, tanto a alumnos como a colegas u otros profesionales. Una de las producciones que muestran esta labor docente universitaria es la elaboración de un Manual o un libro que sirva de base para los estudios. Manuel Lázaro Pulido, el coordinador de la obra, lleva durante más de veinte años dedicado a la docencia de la filosofía y de la historia de la filosofía, especialmente del periodo que va de la Edad Media al pensamiento de la Modernidad temprana. Actualmente es el encargado de la asignatura de Historia de la filosofía medieval y renacentista I, es decir desde la época patrística hasta el siglo XIV incluido, en la Universidad Nacional de Educación a Distancia. De la misma Universidad son los coautores del libro, Alejandro Escudero Pérez, también profesor responsable de la asignatura, y los profesores-tutores de la UNED: Carmen Dolby Múgica y Bernardo Bayona Aznar. Aunque la mayor parte del libro lo ha escrito el coordinador otras partes han sido responsabilidad de los otros coautores, respetando la libertad de matices y posicionamientos de cada uno de ellos de modo que el lector pueda apreciar la variedad historiográfica y de perspectiva filosófica con la que se pueden abordar los periodos históricos del pensamiento occidental. Al lector corresponde tomar partido y valorar cada una de dichas posiciones.
El libro publicado en la Editorial de su Universidad, en coedición con la Editorial Sindéresis está pensado para ser utilizado como material didáctico sin renunciar a ser una obra que sintetice el pensamiento filosófico medieval y que sirva para los alumnos del Grado de Filosofía, no solo de la UNED, sino de otras universidades y como obra que pueda ayudar al estudio de otros profesores. Eso provoca que, por una parte, sea voluminoso, pero también que tenga elementos didácticos. Así se han minimizado las notas a pie de página, que han intentado ser explicativas. Pero también la estructura de la obra se divide en cuatro Unidades didácticas y en diez temas. Cada tema, a su vez, se compone de una introducción que sitúa históricamente y culturalmente el tema, el contenido propiamente dicho, dos textos significativos de autores, unas preguntas que sirven como ejercicios de autoevaluación y una bibliografía en español donde aparecen los manuales más significativos y las páginas en los que se desarrolla el tema, las traducciones de las fuentes más importantes así como bibliografía secundaria, tanto especialmente libros.
El libro se inicia con un Prefacio (pp. 19-21) escrito por el coordinador donde señala como “no se puede sustanciar una etapa tan extensa en el tiempo y tan compleja de una forma simple” (p. 19). Ello indica la extensión de la obra, que digamos también se hace más amplia al tener un cuerpo de letra diseñado para ser leído y estudiado.
Alejandro Pérez Escudero escribe la Introducción: La filosofía de la Edad Media hoy (pp. 23-46) en la que desde una perspectiva “diferente” al de la historia de la filosofía medieval sitúa un lugar, digamos especial, desde dónde leer la filosofía medieval, sus textos y hacia dónde.
En el Tema introductorio. Prolegómenos a la Historia de la Filosofía de la Edad Media observamos dos perspectivas diferentes a la hora de enfrentarse a la Historia de la Filosofía Medieval, las de Alejandro Pérez Escudero, en “Los avatares de la relación de la fe y la razón”, con un discurso de enfrentamiento; y el de Manuel Lázaro Pulido en “Sobre le pensamiento filosófico medieval” en el que pone en valor la necesidad de estudiar el pensamiento medieval liberado de prejuicios e incluso desde una perspectiva positiva, liberando la filosofía de la tiranía del presente: “En este sentido, es necesario acercarse a la filosofía medieval desde una perspectiva en la que sepamos realizar una adecuada tensión entre historia y filosofía que supere las visiones de parte de una cierta hermenéutica moderna” (pp. 62-63).
Tras estos estudios introductorios se inicia la exposición del pensamiento en las Unidades Didácticas.
La Unidad Didáctica I: Los albores de la filosofía medieval (pp. 73-139) trata de los comienzos, de cómo se fue gestando la filosofía medieval cristiana, el salto de la latinitas antigua a la latinitas medieval definido como christianitas. Este paso pasa por lo que se conoce como la latinitas de la Patrística. En el Tema I. La filosofía en la Época Patrística: Agustín de Hipona (pp. 75-108) María del Carmen Dolby Múgica, especialista en el pensamiento de san Agustín, se presenta la contribución filosófica de la Patrística latina y griega y la filosofía de Agustín. A partir de aquí y hasta el tema XIV y exceptuando algún apartado el autor es Manuel Lázaro. El Tema II. La herencia de la filosofía antigua: el nacimiento de la latinitas cristiana (pp. 109-139) profundiza en señalado paso de una latinitas antigua (del pensamiento grecolatino) a la latinitas medieval (nacimiento de la cristiandad), pasando por la latinitas patrística (momento de asimilación del pensamiento grecolatino por el cristianismo). Es lo que otros autores han designado, el paso de la romanitas a la christianitas, especialmente a través de Boecio y de los padres tardíos que señalan el inicio de la christianitas: Gregorio Magno, Martín de Braga e Isidoro de Sevilla.
La Unidad Didáctica II: La filosofía musulmana y judía en la Edad Media (pp. 141-276) supone una apuesta por una mirada amplia al pensamiento filosófico de Occidente, en sus bases no cristianas que permiten entender mejor la transmisión del pensamiento griego a occidente, tanto por las fuentes como por las interpretaciones así como de ensayos sobre una filosofía que enfrenta el reto de lo sobrenatural tanto en sus similitudes de exigencias filosóficas, como en sus diversidades derivadas de la definición dogmática de las diversas cosmovisiones religiosas. Para ello se tratan tres temas: Tema
III. La filosofía islámica en Oriente (pp. 143-189), en la que se estudian los factores internos, los factores externos (la filosofía en Bizancio, el Corpus Dionysianum, Juan Damasceno) y el camino recorrido de Damasco a Bagdad: el encuentro entre la teología cristiana, la filosofía griega y el islam (al-Fârabî, al-Kindi y Avicena); Tema IV. La filosofía islámica en Occidente (pp. 191-242), señalando los autores del espacio al-Andalus, en un periodo en el que frente a la latinitas cristiana se sitúa la lengua árabe como creadora de una identidad arabo-musulmán compartida por todos los habitantes de al-Andalus: Ibn Hazm de Córdoba, Avempace, Ibn Tufayl, Algazel y, especialmente, Averroes; por último, el Tema V. La filosofía judía (pp. 243-276) señala los aspectos fundamentales de los retos filosóficos con los que se enfrenta el pensamiento judío medieval a través de los autores fundamentales de Sefarad: Ibn Gabirol, Saadia Gaon, Isaac el Judío y, fundamentalmente, Maimónides.
La Unidad Didáctica III. La filosofía en el mundo cristiano I. La época de los dos renacimientos (IX-XII) (pp. 277-381), se compone de dos temas en los que se despliegan las bases de la lectura occidental de la tradición filosófica greco-latina a partir de los supuestos de la cristiandad. En el primero de ellos Tema VI. La filosofía en el siglo IX-XI: el renacimiento carolingio y el nacimiento del racionalismo (pp. 279-331), se señala la novedad del renacimiento en torno a la corte de Carlomagno realizando una importante introducción sobre la educación cristiana medieval y por donde desfila la filosofía de Alcuino de York, Rábano Mauro y especialmente Escoto Eriúgena, se habla sobre el bache del siglo X y se presenta la figura del siglo XI: Anselmo de Canterbury. En el segundo tema (Tema VII. El renacimiento filosófico-escolástico en el siglo XII, pp. 333381), pasan las escuelas y los autores más importantes del siglo XII que definen el renacimiento escolástico en torno a la dialéctica y la antidialéctica y los métodos: la Escuela de Chartres, la Escuela de San Víctor, la filosofía racional de Pedro Abelardo, y los métodos en la razón teológica: Bernardo y Pedro Lombardo. El profesor Alejandro Pérez Escudero escribe un apartado sobre la controversia de los universales: el problema y sus principales vías de solución. Termina el tema con una introducción sobre la renovaicón de las fuentes y la transmisión del conocimiento que supuso la Escuela de Traductores de Toledo
La última Unidad Didáctica se centra en el desarrollo de la escolástica: siglos XIII y XIV, con el título Unidad Didáctica IV: La filosofía en el mundo cristiano II. La escolástica universitaria (pp. 383-661). En esta unidad en la que se dedica un extenso tema al siglo XIII y dos al siglo XIV desfilan los autores más significativos de la Edad Media. El Tema VIII. El desarrollo de la escolástica (pp. 385-497), introduce los elementos fundamentales de la filosofía escolástica: la sistematización de las nuevas fuentes (Avicena latino y Aristóteles latino), y las nuevas realidades: la universidad y las órdenes mendicantes. En torno a la Escuela Franciscana y Dominicana se va estructurando los ejes metafísicos que van a ir tejiendo el pensamiento filosófico y que responde a la lectura de la relación entre lo natural y lo sobrenatural en términos de voluntad y entendimiento, naturaleza y gracia, quididad y significado. De entre los autores franciscanos destaca Buenaventura de Bagnoregio pero no quedan sin voz las diferentes generaciones. De la Escuela dominicana el mayor espacio lo ocupa santo Tomás de Aquino tras el estudio de Alberto Magno. El tema no olvida la contribución peninsular señalando a Pedro Hispano y Ramón Llull.
El siglo XIV ocupa los dos últimos temas. El primero titulado Tema IX. La filosofía del siglo XIV (1). Maestros y temas de la escolástica (pp. 499-606) centra su exposición en las figuras de Juan Duns Escoto, sin olvidar sus precedentes e interlocutores (Enrique de Gante, Godofredo de Fontaines y Gonzalo Hispano. No se renuncia al contrario a una lectura contemporánea del doctor Sutil señalando el carácter modal de su filosofía; y de Guillermo de Ockham y la transición que su pensamiento realiza de la via antiqua a la via moderna. Termina el tema señalando la importante filosofía del Maestro Eckhart, de gran trascendencia en la mística renana y la filosofía moderna, así como de realizar una exposición de la influencia universitaria de los principales autores de la escolástica en las cátedras universitarias (tomismo, escotismo, nominalismo).
El Tema X. La filosofía del siglo XIV (2). La transición al renacimiento, centra su atención en la filosofía política y en la filosofía de la ciencia. La primera parte “Filosofía política: el poder eclesiástico y el poder temporal”, está escrito por uno de los historia-dores de la filosofía medieval en español que más y mejor conoce esta problemática, Bernardo Bayona Aznar, distinguiendo de forma clarividente la dialéctica de los dos poderes en los autores más significativos: Juan de París, Nicolás de Oresme, Dante, Marsilio de Padua y Guillermo de Ockham. La segunda parte escrita por Manuel Lázaro, con un apartado de Alejandro Pérez sobre el ímpetus. nos habla del despertar de la ciencia y nos hace ver la importante aportación metodológica y científica de la filosofía medieval del siglo XIV (ya se había visto algo antes en el capítulo referido al siglo XII).
Termina el libro con la introducción de un Glosario y una Bibliografía final de las obras usadas en la elaboración del libro junto con algunas herramientas bibliográficas claves para el estudio de este periodo tan importante de la historia de la filosofía occidental.
Nos encontramos pues ante un libro de Historia de la filosofía medieval con vocación docente y académica a la vez, abierta a diversos públicos, con una actualizada visión sin perder la fuerza de la tradición historiográfica y estructurada en torno a algunos ejes fundamentales especialmente el paso de la latinidad a la cristiandad a través del desafío filosófico introducido por el problema del sobrenatural y las diversas respuestas metafísicas en torno a la libertad y la necesidad.
Por último señalar que realizamos la recensión sobre la segunda impresión que ha corregido las erratas presentes en la primera impresión y que tenían como origen algunos problemas con los ferros y la necesidad de publicar la obra antes del inicio del curso académico, lo que motivó la realización de una segunda lectura. En todo caso estos problemas formales no enturbiaron la calidad de su propuesta, menos ahora que se han subsanado.
Consejo de redacción
Manuel LÁZARO PULIDO, Francisco LEÓN FLORIDO, Estíbaliz MONTORO MONTERO (Eds.), Pensar la Edad Media Cristiana: La presencia de la Teología Medieval en el pensamiento moderno, Madrid-Porto, Editorial Sindéresis (Colección Biblioteca de Humanidades Salmanticensis, Serie Filosofía, 10), 2018, 22 x 14 cm, 426 pp., ISBN: 978-84-16262-06-9.
El libro que presentamos es el segundo que la Editorial Sindéresis publica de una serie de libros colactáneos de filosofía medieval que inician el título de la obra como “Pensar la Edad Media cristiana”, tras publicar Pensar la Edad Media cristiana: La Querella del Imperio y el pensamiento político XIV-XV… (y otros estudios) (Col. Biblioteca de Humanidades Salmanticensis, Serie Filosofía, n. 5). Se trata del resultado del trabajo de investigación del Grupo de Investigación de la Universidad Complutense de Madrid (UCM nº 970723): Filosofía y teología en la Europa de la Edad Media: Atenas,